El Sanvicenteño rompió su racha negativa de ocho derrotas consecutivas en la tarde de ayer y lo hizo en el estreno de Fael como nuevo técnico del Badajoz, equipo que no dio la medida esperada en San Vicente de Alcántara y que vio cómo el Sanvi fue capaz de darle la vuelta a un marcador que se le puso cuesta arriba al inicio mismo del partido, en el minuto 2, cuando el argentino Fernando D'Amico reapareció enviando a la red una rápida jugada pacense, no dando tiempo a muchos aficionados a tomar posesión de sus asientos.
A pesar de comenzar el encuentro con resultado adverso, los locales no se vinieron abajo y lucharon lo indecible poniendo toda la carne en el asador, intentando así la consecución de algo positivo ante un rival respetable. De entrada, no se entendió muy bien el hecho de que el nuevo técnico del Badajoz dejase desde el inicio en el banquillo a Nico Branconi, uno de los canalizadores importantes de juego del equipo albinegro. A pesar de ello, el cuadro pacense se vio con ese tanto a su favor de forma templada, algo que posiblemente le relajó, lo que aprovechó el Sanvicenteño para intentar llevar peligro en distintas ocasiones a la meta defendida por Kouba.
En el minuto 9, fue Bolaños el que concluyó con un fuerte disparo que se marchó alto una trenzada jugada local. En el minuto 19, con un Sanvicenteño que ponía más mordiente y garra que su rival, David García realizaba una buena jugada que concluyó con un gran disparo de Ángel Rodríguez que se coló en el marco defendido por Kouba, estableciendo el 1-1. No conformes con esto, los de Juan García, envalentonados con el tanto del empate, continuaron intentándolo pudiendo aumentar su renta en el minuto 23 cuando un tiro de David García se marchó fuera tras dar en el travesaño.
Tras la reanudación, en el minuto 49, el Badajoz cometió un error garrafal en defensa impropio de un equipo con sus aspiraciones al ceder el balón a Kouba. De este error se aprovechó nuevamente el depredador local del área, Ángel Rodríguez, perforando por segunda vez la meta pacense, poniendo en el marcador el que a la postre sería el definitivo 2-1.
En resumen, resbalón importante del cuadro blanquinegro ante un Sanvicenteño crecido y peleón que, acuciado por su situación en la tabla, sacó lo mejor de sí.
A pesar de comenzar el encuentro con resultado adverso, los locales no se vinieron abajo y lucharon lo indecible poniendo toda la carne en el asador, intentando así la consecución de algo positivo ante un rival respetable. De entrada, no se entendió muy bien el hecho de que el nuevo técnico del Badajoz dejase desde el inicio en el banquillo a Nico Branconi, uno de los canalizadores importantes de juego del equipo albinegro. A pesar de ello, el cuadro pacense se vio con ese tanto a su favor de forma templada, algo que posiblemente le relajó, lo que aprovechó el Sanvicenteño para intentar llevar peligro en distintas ocasiones a la meta defendida por Kouba.
En el minuto 9, fue Bolaños el que concluyó con un fuerte disparo que se marchó alto una trenzada jugada local. En el minuto 19, con un Sanvicenteño que ponía más mordiente y garra que su rival, David García realizaba una buena jugada que concluyó con un gran disparo de Ángel Rodríguez que se coló en el marco defendido por Kouba, estableciendo el 1-1. No conformes con esto, los de Juan García, envalentonados con el tanto del empate, continuaron intentándolo pudiendo aumentar su renta en el minuto 23 cuando un tiro de David García se marchó fuera tras dar en el travesaño.
Tras la reanudación, en el minuto 49, el Badajoz cometió un error garrafal en defensa impropio de un equipo con sus aspiraciones al ceder el balón a Kouba. De este error se aprovechó nuevamente el depredador local del área, Ángel Rodríguez, perforando por segunda vez la meta pacense, poniendo en el marcador el que a la postre sería el definitivo 2-1.
En resumen, resbalón importante del cuadro blanquinegro ante un Sanvicenteño crecido y peleón que, acuciado por su situación en la tabla, sacó lo mejor de sí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Cuidadin con lo que comentas